Cinco fallos en la transcripción
Nota: 5
Desbordado por la oposición de los sóviets, Lvov aceptó dirigir un nuevo gobierno más escorado a la izquierda, con Kerenski como ministro más destacado. Este gobierno hubo que hacer frente a una guerra mundial desfavorable, a movimientos independentistas en Polonia, Finlandia, Ucrania y el Cáucaso, y a la oposición bolchevique. Para acabar con esta última, Lenin fue empujado al exilio y Trotski encarcelado. Todo ello llevó a la dimisión de Lvov en julio y a la llegada de Kerenski a la jefatura de gobierno.
Nota: 5
Desbordado por la oposición de los sóviets, Lvov aceptó dirigir un nuevo gobierno más escorado a la izquierda, con Kerenski como ministro más destacado. Este gobierno hubo que hacer frente a una guerra mundial desfavorable, a movimientos independentistas en Polonia, Finlandia, Ucrania y el Cáucaso, y a la oposición bolchevique. Para acabar con esta última, Lenin fue empujado al exilio y Trotski encarcelado. Todo ello llevó a la dimisión de Lvov en julio y a la llegada de Kerenski a la jefatura de gobierno.
El fracaso de la ofensiva contra los
Imperios centrales y las protestas populares, impulsados por los
bolcheviques y reprimidas por el ejército, llevaron al general
zarista Kornilov a dar un golpe de Estado, que fue abortado
por la Guardia Roja[1]. En septiembre se proclamó la
república. Tras la concesión de una amnistía, muchos bolcheviques
salieron de la cárcel, ocuparon puestos claves en el sóviet y
comenzaron a atraer a los soldados a sus casas.
León Davidovich Bronstein, Troski
(1879-1940), ucraniano de origen judío, fue una figura fundamental
de la Revolución rusa. A la muerte de Lenin cayó en desgracia y
tuvo que huir de Rusia. Fue asesinado en México por un agente de
Stalin en 1940.
2.3 La revolución de octubre
El 9 de octubre Lenin regresó
clandestinamente a Rusia. El comité central bolchevique, decidido a
tomar el poder, encargó a Trotski la movilización de los sóviets.
El 17 de octubre se sublevó el
ejército de la capital incorporándose a la revolución. La
madrugada del 25 de octubre (7 de noviembre en el calendario
occidental) la Guardia Roja y el ejército, con la ayuda del
acorazonado Aurora, tomaron los centros
neurálgicos de Petrogrado y asaltaron y ocuparon el Palacio de
Invierno. Kerenski huyó y el resto del Gobierno provisional fue
arrestado. Lenin tomó el poder en nombre del Consejo de Comisarios
del Pueblo, gobierno revolucionario bolchevique. Fueron «diez
días que estremecieron al mundo».
Diez
días que estremecieron al mundo es un libro publicado por John Reed
en 1919 que narra los acontecimientos de la revolución de 1917. Con
ese mismo nombre, Norman Swallow publicó un documental en 1967 con
imágenes del archivo y de películas de la época.
3. La Unión Soviética: de Lenin a Stalin
Tras
la toma del poder, los bolcheviques necesitaron tiempo y esfuerzo
para consolidar la revolución.
3.1 La etapa de Lenin (1917-1924)
Las
primeras medidas
Ocupado el poder por Lenin, el 26
de octubre de 1917 se dictaron los Decretos de Octubre:
- El Decreto de la Paz, por el que Rusia abandona la Primera Guerra Mundial. El tratado de paz de Brest-Litovsk fue negociado por Trotski con los imperios centrales y ratificado en el Congreso de los Sóviets el 3 de marzo de 1918.
- El Decreto de la Tierra, por el que las tierras fueron expropiadas a sus antiguos dueños y distribuidas entre los campesinos, a quienes también se les condonaron as deudas. Los bolcheviques trataron de convencer a estos de la necesidad de colectivización[2], lo que no se logró fácilmente. En febrero de 1018, ante el problema del hambre y la mala distribución de los alimentos, el Estado se convirtió en único dueño de las tierras.
Otras medidas adoptadas por el
Consejo de Comisarios del pueblo fueron la supresión de los títulos
y privilegios, el derecho de autodeterminación de los pueblos del
antiguo imperio, la elección de los oficiales por los soldados, la
equipación salarial de funcionarios y obreros, y la igualdad de
derechos de la mujer. En el orden económico, se nacionalizaron los
bancos y empresas, que fueron controladas por los obreros, y se
anularon las deudas contraídas por el Estado con instituciones o
Gobiernos extranjeros. También se creó la Tcheka, una
policía secreta destinada a combatir la contrarrevolución, la
especulación y el sabotaje. En 1918, el partido bolchevique pasó a
denominarse Partido Comunista.
La convocatoria a una Duma
constituyente se mantuvo. Las elecciones de enero de 1918
dieron el triunfo a mencheviques y socialrevolucionarios, y la Duma
anuló los decretos de Lenin. Sin embargo, los bolcheviques
boicotearon y disolvieron la Asamblea con ayuda de la Guardia Roja,
por considerar que representaba al Estado burgués. En el III
Congreso de los Sóviets, dominado por los bolcheviques, estos se
declararon herederos legítimos de la Duma y aprobaron la
constitución de la República Socialista Federativa Soviética de
Rusia (RSFSR).
Negociado por Trotski con
Alemania, fue en opinión de Lenin «una
paz vergonzosa para Rusia»
porque perdió Finlandia, los países bálticos, parte de Polonia,
Transcaucasia —Georgia,
Armenia y Azerbaiyán— y
casi toda Ucrania. Además, cedió Besarabia a Rumania, la Dobrudja a
Bulgaria y el Kars al Imperio otomano. Posteriormente Ucrania y
Transcaucasia se incorporaron a la Unión.
[1]Guardia Roja: grupo de
proletarios revolucionarios armados que se encargaba de mantener el
orden en las ciudades. Constituyó el núcleo primitivo del posterior
Ejército Rojo.
[2]Colectivización:
proceso promovido por el poder bolchevique según el cul los
campesinos debían entregar la propiedad de sus tierras al Estado.