domingo, 14 de enero de 2018

U10. LAS DEMOCRACIAS Y EL ASCENSO DE LOS TOTALITARISMOS

Fuera de plazo, era para subirlo antes del domingo 14 de enero. El sábado era el último día.
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02.2 El fascismo italiano

La crisis de la democracia burguesa (1919-1922)

Aunque vencedora en la Gran Guerra, Italia no obtuvo de los tratados de paz los territorios que anhelaba. A las pérdidas sufridas se sumaron un fuerte endeudamiento exterior, una baja producción industrial e inflación. Como consecuencia, las huelgas y los conflictos sociales aumentaron.

La amplitud de fuerzas políticas devino en sucesivos e inestables gobiernos de coalición y en un Parlamento inoperante. En ese contexto, grupos no democráticos recogieron las aspiraciones nacionalistas y antirrevolucionarias de parte de la población.

En 1919, Benito Mussolini fundó los primeros fasci di combattimento, bandas de ciudadanos desideologizados e imbuidos de los valores militares. Su principal actividad fue combatir violentamente a obreros y campesinos, lo que les granjeó el apoyo de las clases medias y de la alta burguesía. A partir de esos grupos y por iniciativa de Mussolini, en 1921 se fundó el Partido Nacional Fascista que, en las elecciones de ese año, solo logró 35 diputados.

Su actividad política se acompañaba de actos violentos de intimidación, por lo que, en agosto de 1922, los sindicatos convocaron una huelga general contra el partido fascista. Las escuadras de acción, formadas por radicales fascistas (los escuadristas), respondieron apaleando a los obreros y expulsando a los alcaldes de algunos pueblos. Al mismo tiempo, los fascistas mantuvieron en funcionamiento los servicios de correos, trenes y autobuses, lo que les proporcionó la simpatía de la clase media, que se sintió segura. 

Mussolini, maestro, periodista y antiguo socialista, intentó rescatar los símbolos y ademanes de la Roma imperial. Se hizo llamar duce, derivado del latín dux, que significa caudillo o jefe militar.

La dictadura de Benito Mussolini (1922-1926

En octubre de 1922, Mussolini se ofreció el rey Víctor Manuel III como única salida de la crisis, y anunció la Marcha sobre Roma de miles de camisas negras, quienes se concentraron en las afueras de la capital. Una semana más tarde el rey cedió y le encargó la formación de un Gobierno de concentración.

Mussolini, investido de plenos poderes por el Parlamento, elaboró una ley electoral que favorecía a la minoría más votada y convocó elecciones. En 1924, tras una campaña llena de agresiones e intimidaciones por parte de los fascistas, estos ganaron las elecciones. El diputado socialista Giacomo Matteotti denunció la violencia, las irregularidades y el falseamiento de los resultados electorales. A los pocos días, en junio de 1924, fue asesinado por los escuadristas. Este crimen, aprobado por Mussolini según la oposición, provocó la condena de amplios sectores de la sociedad italiana. Los diputados no fascistas, en señal de protesta, abandonaron el Parlamento, al que ya no regresarían.

El caso Matteotti reforzó a Mussolini que, respaldado por el rey y dueño de la situación, pasó a actuar como un dictador. Así, promulgó leyes de excepción que suprimieron la libertad de prensa y de reunión, y anuló los escaños de los diputados de la oposición. Con impunidad, los escuadristas quemaron libros y atentaron contra los disidentes.

LA MARCHA SOBRE ROMA. La gran movilización de militantes del Partido Nacional Fascista italiano, conocidos como camisas negras por su uniforme, logró vencer la resistencia del monarca Víctor Manuel III.

El Estado totalitario italiano

La dictadura, concebida como un estado de excepción dentro de la democracia burguesa, dio paso al Estado totalitario mediante las <<leyes fascistísimas>> aprobadas en 1925 y 1926:







  • Mussolini se autoproclamó capo di Governo, con poderes ejecutivos y legislativos, y responsable solo ante el rey.
  • El partido fascista se convirtió en el único partido y el resto fueron disueltos.
  • Se instauró el sindicalismo vertical corporativo, organización laboral en ramas profesionales que integraba a trabajadores y empresarios.
  • Se restableció la pena de muerte, se fundó la OVRA (1927), una policía secreta de carácter político, y se creó un tribunal de <<defensa del Estado>>, nombrado por el propio Mussolini, que juzgaba sin garantías procesales y cuyas sentencias eran inapelables.
LAS CONCENTRACIONES FASCISTAS EN ITALIA. Benito Mussolini se dirigía a la multitud apelando a la historia de Italia y su unidad. Utilizaba para ello escenarios espectaculares, donde los uniformes, consignas y símbolos estaban muy estudiados.



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